«Del desastre humanitario a la negación de derechos, los niños son las primeras víctimas de las guerras»
Paola Binetti, patrono de la Fundación Promoción Social, es miembro [...]
Paola Binetti, patrono de la Fundación Promoción Social, es miembro [...]
Rossella Miranda Delegate of the Social Promotion Foundation in Italy [...]
Rossella Miranda Delegada de la Fundación Promoción Social en Italia [...]
Rossella Miranda Delegata di Fundación Promoción Social in Italia “Libertà [...]
Este capítulo analizará la capacidad de liderazgo de las mujeres en distintas regiones árabes y destacará su papel clave en el desarrollo económico y social dentro de sus países. Asimismo, a lo largo de las siguientes páginas se describen las capacidades y estilos de liderazgo femenino y se comparan con aquellos atribuidos a los hombres.
La Ciudad Vieja de Jerusalén ocupa un espacio de menos de un kilómetro cuadrado en el que viven 35.000 personas de todo el mundo que pertenecen principalmente a las "Tres Grandes" religiones monoteístas: el Islam, el Judaísmo y el Cristianismo. Y como muchas ciudades antiguas, estaba constantemente rodeada por un muro. Sin embargo, al profundizar en las historias tras la muralla de la ciudad, surge un patrón que muestra que estos muros no se construyeron para alejar a los enemigos, sino más bien para proteger y unir a las personas y a los lugares dentro de ellos.
Graduada en Relaciones Internacionales en la UCM y asistente de producción y edición del documental Walking next the wall
The human development of the populations living in the countries of North Africa and the Middle Easta has played a key role in initiating the so called Arab Spring that led to the fall of dictatorial regimes as well as deep political and social changes
El desarrollo humano de las poblaciones que viven en los países de Norte de África y de Oriente Medio jugó un papel clave en el comienzo de la Primavera Árabe que llevó a la caída de los regímenes dictatoriales, así como a profundos cambios en la política y en la sociedad
El desarrollo humano de las poblaciones que viven en los países de norte de África y de Oriente Medio jugó un papel clave en el comienzo de la Primavera Árabe que llevó a la caída de los regímenes dictatoriales, así como a profundos cambios en la política y en la sociedad.