El Centro de Estudios de Oriente Medio de la Fundación Promoción Social (CEMO) organizó el martes 13 de junio el Seminario: «De crisis a oportunidad: Agua y Desarrollo Sostenible en Oriente Medio», en Casa Árabe de Madrid.
El seminario, financiado por la Agencia Española de Cooperación Internacional para el desarrollo (AECID), se estructuró en dos sesiones, durante las cuales los expertos realizaron una reflexión sobre soluciones para el agua y saneamiento en Cisjordania y Gaza, y el agua como recurso para la Cooperación Regional.
Tras las palabras de bienvenida realizadas por Pedro Antonio Villena y María Beamonte, directores de Casa Árabe y Fundación Promoción Social respectivamente, intervino Mazen Ghuneim, Director de la Autoridad Palestina del Agua.
Según él, la seguridad hídrica en Palestina no existe, y es importante para la conformación del Estado de Palestina. El agua es uno de los principales retos del conflicto israelí-palestino junto con la cuestión de Jerusalén, las fronteras y los asentamientos israelíes. Otro problema y reto del sector del agua en Palestina es la financiación, la falta de infraestructuras y los daños que las operaciones militares provocan sobre las existentes.
Seguidamente, Giulia Giordano, EcoPeace Middle East, realizó una presentación sobre «El Estado de la Seguridad Hídrica en Oriente Medio». Según ella, entre los retos a los que se enfrenta Oriente Medio están la escasez crónica de agua, el cambio climático con subida de las temperaturas y escasez de precipitaciones, el crecimiento demográfico y la inestabilidad política.
A continuación, tuvo lugar la primera sesión, con el título «Un puente sobre el Jordán. El agua como recurso para la Cooperación Regional», que contó con la presencia de Deeb Abdelghafour, Director General de Recursos hídricos de la Autoridad Palestina del Agua, Gidon Bromberg, Co-Director israelí de EcoPeace Middle East, Domingo Zarzo Martínez, Director Técnico y de I D i de VALORIZA Agua (SACYR), y Alejandro Maceira Rozados, Fundador y Director de iAgua, que actuó como moderador.
Deeb Abdelghafour manifestó que los palestinos no tienen autorizados el uso y acceso al agua del río Jordán desde la ocupación israelí de Cisjordania en 1967, que el Máster Plan de la cuenca del río Jordán tiene que reformularse para reflejar las necesidades de los palestinos, y que la cooperación debe realizarse considerando las bases de la equidad para alcanzar un acuerdo duradero y justo.
Gidon Bromberg, por su parte, indicó que el río Jordán tiene una gran importancia cultural y religiosa para las tres religiones monoteístas. Según él, existe una pérdida de un tercio de la superficie del Mar Muerto por sobreexplotación de los países ribereños. Añadió que hay una gran implicación de la sociedad civil, líderes religiosos y gobernantes locales para preservar el estado ambiental del río Jordán.
Domingo Zarzo, durante su intervención, manifestó que la demanda de agua se ha multiplicado por seis entre 1915 y 2015. Comentó que se ha producido un aumento de las fuentes de agua no convencionales y que Oriente Medio está a la cabeza de la desalación. Añadió que ocho de las veinte empresas de desalación más grandes del mundo son españolas.
Posteriormente tuvo lugar la segunda sesión con el título «El agua no puede esperar. Avanzando soluciones para agua y saneamiento en Cisjordania y Gaza». Moderada por Ana Muñoz Llabrés, Jefa del Departamento de ONGD de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID), contó con la presencia de Sandra Puig Infante, Jefa de área de Control y Vigilancia de la Calidad de las Aguas Dirección General del Agua, Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y MA, Nada Majdalani, Co-Director palestino de EcoPeace Middle East, Miguel García-Herraiz, Vice Secretario General, Agua y Medio Ambiente de Unión por el Mediterráneo, y Diego Molina Machés, Licenciado en Ciencias Ambientales & Máster en Ingeniería del Agua y Técnico de Proyectos de Fundación Promoción Social.
Sandra Puig se refirió al tema de la intrusión salina en la cuenca mediterránea española como ocurre en Gaza.
Nada Majdalani, inició su intervención con un alegato: «Water cannot wait!» (¡El agua no puede esperar más!). Comentó la paradoja de que el 80%-90% de la cuenca de recarga del acuífero central está en Cisjordania, mientras que el 80% de la cantidad de agua del acuífero central es usado por Israel. Concluyó que los problemas de agua se pueden resolver hoy con bajo coste político para Israel pero con alto beneficio político para Palestina.
Miguel García-Herráiz indicó que existen reticencias a la hora de innovar en el campo del agua y que existen nexos entre agua-energía y agua-seguridad alimentaria.
Diego Molina se refirió a los proyectos de Promoción Social en materia de agua en Palestina. La Fundación destina aproximadamente un 15% de sus recursos a proyectos de agua. Además, tras un intenso debate entre los presentes, entre los que se encontraba Ramón Llamas, Director Emérito del Observatorio del Agua de la Fundación Botín, se encargó de leer las conclusiones del seminario, tras lo que se dio por concluido el mismo.